Caracas (AFP/ La Nación/ EFE).- Familiares y autoridades recibieron, este viernes 16 de septiembre, en Caracas a 12 tripulantes de un avión de carga venezolano que permanece retenido en Argentina desde hace más de tres meses por una investigación que involucra a Estados Unidos e Irán.
"Estoy sumamente emocionado de volver. Realmente estar aquí, compartiendo con nuestra familia (...), nos llena de emoción", dijo a la televisión estatal uno de los tripulantes, el capitán Vicente Raga, después de que el avión que los transportó aterrizara en el aeropuerto internacional de Maiquetía, a unos 25 kilómetros de Caracas.
El martes, la justicia argentina autorizó la salida de 12 de los 19 tripulantes de la aeronave retenida, de la aerolínea Emtrasur, filial de la estatal venezolana Conviasa, sancionada por Estados Unidos.
La Cámara Federal de Apelaciones de La Plata convalidó la decisión del juez Federico Villena, que levantó el 1 de agosto la prohibición de salida de Argentina que pesaba sobre once tripulantes venezolanos y uno iraní, según una sentencia divulgada por la prensa.
"Una parte de nosotros se quedó allá, con los compañeros que no vinieron, pero esperamos que pronto estén de vuelta", agregó Raga.
Todavía tienen prohibido salir de Argentina cuatro iraníes (entre ellos Gholamrez Ghasemi, acusado de pertenecer a la fuerza Al Quds) y tres venezolanos.
Más de tres meses en Argentina
"Estamos celebrando la llegada de nuestros primeros 12 tripulantes de nuestro avión Emtrasur. Son ejemplo de ética, de fortaleza y de lucha", manifestó el ministro de Transporte, Ramón Velásquez Araguayán, en una recepción preparada por el Gobierno, que califica la situación vivida en Argentina como "un secuestro".
El Boeing 747 de Emtrasur llegó a Argentina el 6 de junio, procedente de México, con una tripulación venezolano-iraní y una carga de autopartes.
Sin poder abastecerse de gasolina en Buenos Aires debido a las sanciones estadounidenses, el avión partió hacia Uruguay el 8 de junio, pero las autoridades uruguayas le negaron el ingreso y debió regresar al aeropuerto argentino de Ezeiza. La justicia inició entonces una averiguación y prohibió salir del país a la tripulación.
El aparato fue comprado hace un año a la aerolínea iraní Mahan Air.
A mediados de agosto, el juez Villena admitió un pedido de Estados Unidos para incautar el Boeing 747, en atención a una orden de una corte de distrito de Columbia, según la cual "se violaron las leyes de control de exportación" estadounidenses cuando el aparato fue vendido.
Ilegalmente secuestrado
Parte de la tripulación del avión de carga venezolano-iraní retenido en Ezeiza arribó el viernes a Venezuela, según imágenes de una televisora estatal.
El 13 de septiembre la Justicia Federal de Argentina autorizó la salida del país de 12 de los 18 tripulantes que tenían. Se trata de Mahdi Mouseli, Victoria Valdiviezo Marval, Cornelio Trujillo Candor, Vicente Raga Tenias, José Ramírez Martínez, Zeus Rojas Velásquez, Jesús Landaeta Oraa, Armando Marcano Estreso, Ricardo Rendon Oropeza, Albert Gines Pérez, Ángel Marín Ovalles y Nelson Coello.
”Estamos celebrando la llegada” de la tripulación que es “ejemplo de lucha revolucionaria”, dijo el ministro de Transporte, Ramón Velásquez, a Telesur desde el Aeropuerto de Maiquetía, cercano a Caracas.
El funcionario agregó que “estamos esperando el regreso del resto que está retenido ilegalmente”. En Buenos Aires quedan siete tripulantes, dos venezolanos y cinco iraníes con medida de prohibición de salida del país.
“Llegan al país 12 tripulantes del Avión Emtrasur ilegalmente secuestrado por las autoridades judiciales argentinas -destacó por su parte el viceministro de la Cancillería venezolana, Rander Peña Ramírez-. Todos los venezolanos celebramos con alegría el reencuentro y el abrazo de 12 familias quienes anhelaban ver a sus seres amados. ¡Enhorabuena, ya están de vuelta!”.
Petición de libertad para los 7 tripulantes
La petición de libertad para los 7 tripulantes del avión retenido en Argentina que permanecen en ese país, con la prohibición de salir, marcó la llegada a Venezuela, este viernes, de los 12 que fueron liberados, tras más de 3 meses en Buenos Aires, donde continúa la investigación de la aeronave por posibles vínculos con el terrorismo internacional.
Con música y aplausos de familiares, empleados del aeropuerto y personas que transitaban por la terminal, fueron recibidos los tripulantes -entre ellos 11 venezolanos y un iraní- luego de que aterrizaran en el Aeropuerto Internacional de Maiquetía, que sirve a Caracas, cerca de las 18.30 hora local (22.30 GMT).
Entre quienes los esperaban, estaba el ministro de Transporte, Ramón Velásquez, también presidente de la aerolínea estatal Consorcio Venezolano de Industrias Aeronáuticas y Servicios Aéreos (Conviasa), propietaria del avión venezolano-iraní retenido en Buenos Aires.
Velásquez dijo a Efe que el país no descansará hasta que Argentina libere a los otros siete tripulantes -tres venezolanos y cuatro iraníes-, que están "detenidos ilegalmente", y devuelva la aeronave, que, según ha declarado recientemente el funcionario, importaba "vacunas, medicamentos e insumos médicos" y enviaba ayuda humanitaria a algunos países como "Colombia (y) Nicaragua".
El funcionario señaló que están "fortaleciendo más las estrategias (y) organizando los equipos diplomáticos para que, más temprano que tarde", aterricen en Venezuela tanto el avión como el resto de la tripulación.
Júbilo a medias
Entre los liberados, está el piloto Cornelio Trujillo -ingeniero de vuelo de 66 años de edad- quien, al llegar al aeropuerto, dijo a Efe que se sentía "feliz" por reunirse nuevamente con su familia y amigos en su país, tras "tres meses duros" en Argentina, donde, sin embargo, aseguró que fueron "bien tratados (y) bien mantenidos".
"Pero, de todas maneras, el daño psicológico que teníamos era bastante fuerte", agregó.
"Aunque fuimos nosotros liberados, tengo compañeros todavía en Argentina que están enfrentando el proceso, que, como yo, no tienen ningún tipo de culpa. Nos tuvieron allá 99 días y, hasta los momentos, no sé por qué, es político, no sé, ahí no me meto, pero, cuando mis compañeros regresen, ese día voy a ser muy feliz", dijo Trujillo, con 46 años de experiencia como piloto.
Tres largos meses de incertidumbre
El avión retenido en el Aeropuerto Internacional de Buenos Aires, en la localidad bonaerense de Ezeiza, es un Boeing 747 Dreamliner de carga, que fue propiedad de la empresa iraní Mahan Air y que actualmente pertenece a Emtrasur, filial del Consorcio Venezolano de Industrias Aeronáuticas y Servicios Aéreos (Conviasa).
Ambas empresas están sancionadas por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos.
La aeronave ingresó en Argentina el 6 de junio procedente de México, haciendo escala en Venezuela, presuntamente para trasladar cargamento a una empresa automotriz, y 2 días después despegó para ir a Uruguay a cargar combustible, pero aterrizó nuevamente en el aeropuerto argentino porque el país vecino no habilitó su aterrizaje.
Sin embargo, las petroleras argentinas no cargaron combustible al avión por temor a las sanciones de Estados Unidos y posteriormente, el 11 de junio, se difundió que el Gobierno argentino había ordenado inmovilizar el avión.
Unos días después, un juez ordenó retener los pasaportes e impedir la salida del país de los tripulantes, que nunca fueron detenidos y hasta ahora han tenido plena libertad de movimientos. Ya en agosto, el Departamento de Justicia de EE.UU. solicitó a Argentina que le permitiera confiscar la aeronave.
La respuesta de Venezuela
La reacción del Gobierno de Nicolás Maduro fue contundente, y ni siquiera fue suavizada ante el hecho de que las relaciones diplomáticas entre ambos países apenas habían comenzado a deshelarse tras haber sido degradadas durante el Gobierno del expresidente Mauricio Macri (2015-2019).
Como "un secuestro" fue catalogada la retención del avión por el presidente Nicolás Maduro y altos funcionarios, quienes promovieron una campaña para exigir la vuelta de la tripulación y la entrega de la aeronave.
Para 12 de ellos terminó la incertidumbre el pasado martes, cuando la Justicia argentina autorizó su salida, tras un primer fallo emitido a principios de agosto por el juez Federico Villena, quien levantó la prohibición y autorizó a devolver los pasaportes a 11 venezolanos y un iraní, a condición de presentarse, mensualmente, ante las Embajadas de Argentina en sus respectivos países.-